En 1929 Dalí colaboró con el director de cine Luis Buñuel, amigo de la residencia de estudiantes, en la redacción del polémico cortometraje Un chien andalou, en el que se mostraban escenas propias del imaginario surrealista. Dalí afirmó haber desempeñado un papel esencial en el rodaje del film, sin que este extremo se haya visto confirmado por la historiografía del arte contemporáneo.En agosto de ese mismo año conoció a su musa y futura esposa Gala. Nacida con el nombre de Elena Ivanovna Diakonova, era una inmigrante rusa, once años mayor que él, en aquel tiempo casada con el poeta francés Paul Éluard. Ese mismo año, Dalí continuó exponiendo regularmente, ya como profesional, y se unió oficialmente al grupo surrealista afincado en el barrio parisino deMontparnasse. Durante los dos años siguientes, su trabajo influyó enormemente en el rumbo del surrealismo, que lo aclamó como creador del método paranoico-crítico, el cual, según se decía, ayudaba a acceder al inconsciente, liberando energías artísticas creadoras.

En 1931 Dalí pintó una de sus obras más célebres, La persistencia de la memoria (Los relojes blandos), obra en la que según algunas teorías ilustró su rechazo del tiempo como una entidad rígida o determinista. Esta idea se ve apoyada por otras imágenes de la obra, como el extenso paisaje, o algunos relojes de bolsillo devorados por insectos. Los insectos, por otra parte, formarían parte del imaginario daliniano como una entidad destructora natural y, tal como explicó en sus memorias, venía determinada por un recuerdo de infancia.
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